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Con la llegada de las vacaciones y las altas temperaturas, el verano se convierte en sinónimo de diversión, amigos y, sobre todo, relajación. Sin embargo, este verano 2022, continúa la pandemia, y junto al cuidado regular de las altas temperaturas, debemos cuidarnos del Covid-19.
Las altas temperaturas que se registran en ciertos días estivales, pueden tener consecuencias negativas en nuestra salud en verano, principalmente en niños, ancianos y personas con enfermedades crónicas. Por eso, es necesario cuidar la salud, con el fin de disfrutar las vacaciones. A continuación se detallan algunos consejos para disfrutar de la salud en verano.
- Protéjase frente al COVID-19
A pesar del agobio que nos produce ir con mascarilla cuando hace calor, las altas temperaturas no deben ser sinónimo de bajar la guardia porque la pandemia no ha terminado. Debemos seguir con las medidas para la reducción de los contagios de COVID-19.
- Coma sano
Las salidas a comer fuera y el famoso picoteo se disparan con el buen tiempo. Esto provoca cambios en los horarios de comidas y en la propia alimentación. Lo relevante es mantener una dieta equilibrada, comer fruta, además de sus propiedades nutricionales, ayudarán a mantenerse hidratado.
- Manténgase activo/a
Mucha gente, con la llegada del calor, cae en el sedentarismo, lo que les provoca un aumento considerable de peso y, por lo tanto, un empeoramiento de su salud. No hay excusas: es necesario salir a pasear o correr un rato cada día, aunque sea a última hora de la tarde.
- Hidrátese
Los golpes de calor no perdonan, y la única manera de evitarlos es llevar una botella de agua en mano, u optar por bebidas refrescantes como las granizadas. Cuidado con las bebidas con mucho azúcar, porque son contraproducentes.
- Evite el alcohol
Recuerde que las altas temperaturas provocan deshidratación y esto, sumado a la pérdida de agua (consecuencia del consumo de alcohol) puede arruinar un día de playa o una tarde con amigos. El alcohol contribuye a la deshidratación, lo que en verano puede suponerte un problema grave. Evite el Alcohol si esta expuesto al sol o beba con precaución. Es recomendable el consumo de fruta, agua y bebidas isotónicas en la playa.
- Protéjase del sol
En los meses de verano, las quemaduras solares son una de las consecuencias más frecuentes de la exposición solar en verano, además pueden provocar un envejecimiento prematuro. Evite la exposición al sol durante las horas de mayor intensidad, use ropa con factor de protección solar y combínalo con un protector solar de FPS alto (entre 30 y 50).
- Cuidado con el agua de la piscina
El agua de las piscinas lleva cloro y, al abrir los ojos debajo del agua, nos arriesgamos a sufrir molestias o irritación.
- Controle el estado de los alimentos
Los huevos, la carne, el marisco, etc. son solo algunos de los muchos alimentos que se deterioran con el calor. Asegúrese de que están en buen estado antes de consumirlos. Y ¡ojo! Cuidado con las cremas y la mayonesa, ya que en mal estado pueden causar intoxicaciones graves.
- Duerma bien
A veces, el calor es tan insoportable que no deja dormir. Para solucionarlo, procure beber mucha agua y dormir en un lugar ventilado. De lo contrario, no podrá descansar como es debido.
- Enfermedades crónicas: extrema las precauciones
El calor excesivo del verano supone un riesgo añadido para los hipertensos. Sin embargo, en las zonas costeras, estar al nivel del mar contribuye a la reducir la presión arterial. Si padece hipertensión recuerde mantener una buena hidratación, vigilar el consumo de sal y mantener una actividad física regular. Y si va a salir de vacaciones no olvide un previo chequeo.